Que debilidad esconden las sombras de mi soledad

No hay un solo brillo en la oscuridad de mis ojos

No soy ciega pero estoy ciega de amor

Pensamientos enrredados que no me hacen pensar

Con la misma claridad que las aguas del mar

Aquellas noches de pasión ya olvidadas

Pero con aroma en las sabanas

No consigo olvidar la suave caricia que hacia bibrar mi corazón

Recuerdos encerrados en mi alma sin poder salir

No aprendo a vivir

Pero tampoco quiero sin el sentir de tu dulce boca

Que el reposo de mi descanso haga nido en tu alma por siempre

Que el silencio en tu calido hogar te haga pensar en las noches que te abrazaba con palabras